Great Wall da un paso adelante y crea centro de investigación de Haval
Haval, la marca de Great Wall Motors Company, distribuida por Derco Perú, surgió en el año
2013 con la decisión de convertirse en líder mundial en el desarrollo de SUV (Sport Utility
Vehicle) de lujo, en los que se conjuga diseño, tecnología, seguridad y equipamiento premium,
todo a un precio accesible. Su nombre mismo lo dice: “Have it all” (“Tenerlo todo”).
Para lograrlo, Haval tiene a la mano al equipo de diseñadores y desarrolladores de vehículos de
su marca madre, Great Wall Motors. Pero además, en el transcurso de estos pocos años en el
mercado, Haval ha establecido acuerdos estratégicos con numerosas compañías mundialmente
reconocidas como ZF, Bosch y BorgWarner, a las que invitó a instalarse en el Parque Industrial
de Autopartes, cerca de su planta automotriz en Xushui, en China.
Ahora Great Wall da un paso más al crear su primer Centro de Investigación y Desarrollo fuera
de China, concretamente en Japón, en el cual profundizará el estudio de aspectos como la
confiabilidad del vehículo y la economía de uso de combustible. Allí se trabajará además sobre
los conocimientos avanzados que tienen los japoneses en cuanto a nuevos materiales y nuevas
fuentes de energía a fin de crear vehículos más seguros, inteligentes y amigables con el medio
ambiente.
La palabra clave aquí es integración. Lo que Great Wall Motors quiere obtener para Haval es
un alto grado de investigación y desarrollo independiente, que tome ventaja del excelente
estándar de la ingeniería automotriz japonesa, y conjugarlo con las tecnologías globales
avanzadas que aportan sus compañías proveedoras, entre las que se cuentan las más importantes
del mundo.
Con los grandes de la industria
La alemana Mahle GmbH es uno de los más grandes proveedores de componentes y sistemas
para motores de combustión en el mundo. Su relación con China es tan intensa que ha
establecido catorce fábricas en ese país para la elaboración de componentes clave y partes de
motores, como pistones y válvulas, con los cuales surte a sus clientes General Motors,
Volkswagen, Ford, Toyota, Nissan y, por supuesto, Great Wall y Haval.
Mahle provee a Haval con los sistemas térmicos y de aire, pistones de motor de alta
sofisticación y otros componentes clave, así como partes de motores. En transmisiones, la
también alemana ZF aporta toda la experiencia acumulada en marcas como DKW,
Mercedes-Benz, Porsche, BMW, Peugeot, Alfa Romeo, Ford, y más recientemente, Chrysler y
Jeep.
El diseño 4WD de las SUV de Haval está a cargo de BorgWarner Inc. (que cuenta entre sus
clientes a Peugeot, Ford, Renault, Honda y Volkswagen, y desarrolló especialmente un turbo de
geometría variable para el 911 Turbo de Porsche), y de GKN, líder mundial en el manejo de
líneas de transmisión y cuyo know-how se extiende a la industria de la aviación y la navegación
aeroespacial.
En lo relativo a sistemas activos y pasivos de seguridad, los vehículos Haval no podían contar
con mejores empresas asociadas. La norteamericana Autoliv se encarga de los airbags,
cinturones de seguridad, timones y sistemas electrónicos. Con su slogan “Pasión por salvar
vidas”, se trata de una empresa con 63 años de experiencia en este rubro específico. La empresa
global Continental, y en particular su división Chasis & Seguridad, tiene bajo su
responsabilidad la seguridad en la dirección, además de sensores y componentes de chasis.
TRW, a su vez, brinda soluciones para componentes de freno, dirección y suspensión, mientras
que el gigante Bosch lo hace con el sistema antibloqueo (ABS) en las ruedas que garantiza una
frenada segura, con el vehículo bajo control del conductor y una reducción de la distancia de
parada.
Finalmente, el sistema de puertas está a cargo de un absoluto especialista: Brose, presente en 23
países y máxima autoridad en puertas y asientos de vehículos desde hace 108 años.